La iniciativa busca que los emprendedores se alíen en consorcios –una figura legal ágil que permite el fortalecimiento de negocios mipymes de todo tipo– basados en identidad cultural como elemento diferenciador.
El proceso iniciará con con talleres informativos, los cuales son requisito para ingresar al programa. Los grupos de empresas interesados deberán inscribirse antes del 3 de julio.
Posteriormente se realizará una inscripción formal que incluye las propuestas de consorcios que se formen a partir de prototipos de nuevos productos.
Para la elaboración de las propuestas de consorcios se otorgará ¢3,7 millones. Para la siguiente etapa, de puesta en marcha de los consorcios, se dará ¢22 millones.
Con los fondos de capital no reembolsable para zonas rurales, los participantes recibirán un acompañamiento de seis meses para cumplir con todo lo estipulado en el reglamento establecido por el MEIC para la creación de consorcios.
La propuesta se basa en la conformación de consorcios regionales que contengan elementos de:
–Artesanía y Diseño
–Turismo
–Alimentos y cosméticos
–Productos y servicios con identidad-cultura
Los consorcios deben integrar la identidad cultural como factor diferenciador de su propuesta, utilizando cualquier combinación los siguientes elementos:
–Naturaleza: elementos de origen natural (de flora o fauna) que permitan ser un identificador de la zona.
–Productos de origen: productos representativos que son reconocidos como origen de la zona.
–Patrimonio material: representan un testimonio y simbología histórico-cultural para los habitantes de una cierta comunidad.
–Patrimonio oral e inmaterial: creaciones de una comunidad cultural fundadas en las tradiciones.
–Historia: hechos determinantes que hicieron surgir a una localidad, hechos históricos y puntuales que acerquen a visitantes al lugar.
El enlace de inscripción se encuentra disponible en línea. También se puede consultar información relevante en la página web.
